miércoles, 30 de mayo de 2012

Miércoles, 12.30 del mediodía. Sol, al fin sol. Voy caminando y me encuentro con Rodo a la vuelta de casa. Teníamos pactado encontrarnos a esa hora para hablar sobre el tan esperado CD de Golová, su banda, llamado "PAF!". El conjunto se inició a mediados del año 2006 con una formación similar a la que hoy en día se presenta en los escenarios del ambiente underground. 
Rodo es el baterista de Golová desde que comenzó, y junto con Feta, el guitarrista, y Jose, el bajista, son los tres pilares que se mantuvieron a lo largo de estos 6 años. Fran, el cantante y segundo guitarrista de la banda, se incorporó un tiempo después. 





- Rodo, ¿Qué se siente poder haber grabado su primer disco luego de tantos años juntos?

Un alivio. En realidad era una necesidad también porque veníamos componiendo hace mucho tiempo, desde un comienzo. De hecho hay temas como "Hamartía del impulso" que es de la primera etapa, así también "Un camello en el club med", que pasó por un montón de versiones, la letra era más larga y la fuimos recortando. A medida que pasaban los años fuimos priorizando canciones, dándoles forma, y también eliminando.  
Pero la verdad que fue un alivio haberlo terminado porque terminó una etapa y ahora hay que empezar la siguiente.

- ¿Cuánto tiempo les llevó realizar este CD?

Uf...(suspira). En junio de 2010 fue la primera reunión con Agustín Mongelli, que es el que nos orientó y para conversar, proponerle nuestra idea de hacer un disco. De ese momento del 2010 hasta que entramos a grabar al estudio pasó un año porque en agosto de 2011 comenzamos y terminamos de grabar, mezclar a mediados de marzo del 2012. Así que bueno, fue un proceso bastante largo, sí. 

- ¿Quién compone la música/letras? ¿Se dividen un poco los roles? ¿O lo hacen de forma grupal?

La verdad que es bastante grupal. Si bien cada uno tiene como ciertas habilidades en diferentes aspectos de la canción. Componemos mucho grupalmente. Durante todo este tiempo pasamos diferentes formas de componer, fuimos madurando en ese sentido. Antes, por ahí, yo venía con una letra y tratábamos de poner una melodía y no quedaba muy bien (risas). En algunas canciones funcionaron, "Hamartía del impulso" por ejemplo, se acopló muy bien la melodía a la letra. Generalmente, yo soy de escribir, Jose y Fran tienen mucha facilidad para las melodías y Feta es un "arma letal" que tenemos nosotros porque es alguien que sabe interpretar muy bien las ideas del otro, es muy rápido para crear un riff. Pero entre todos vamos componiendo la canción, es muy democrático. Nunca descartamos algún tema rápidamente, tratamos de probar siempre, de buscarle la vuelta, grabarla en el ensayo y luego analizarla.

- Rodo, vos tenes una gran capacidad para la filmación, ¿No está la idea de realizar un video con alguna canción del nuevo disco? 

Estamos con esa idea en la cabeza, pero a veces no podemos abarcar todo ya que somos nosotros cuatro y nadie más. Después de esto que fue grabar estamos queriendo tocar y al mismo tiempo vendiendo discos.
La idea del video está pero en este momento la prioridad es otra cosa, es tratar de mostrar "PAF!" por otros lados. Por supuesto que la difusión del video está buenísima y estamos en tratativas ya que estuve hablando con amigo mío que estudió cine y estamos con la idea de hacerlo probablemente para fin de año. Ojalá pronto. Por ahora aprovechar los fin de semana para tocar. 

- ¿Cuál es su objetivo a alcanzar con la banda? 

A mi desde toda la vida lo que más me apasiona es esto, la música. Cada uno de nosotros tiene su laburo y profesión pero la música es algo que por mi parte la conocí a los 15 años, cuando arranqué a tocar la batería y a partir de allí nunca dejé de tocar. Me encantaría poder extender Golová todo lo que fuese posible, sobre todo el proyecto. En la banda encontré un buen lugar para expresarme, tanto en los compañeros como en el tipo de música que hacemos. Luego de tocar en varias bandas me di cuenta que esto es lo que quería hacer, entonces me gustaría que Golová durase lo que tiene que durar, pero la idea es proponerse metas y tratar de ir cumpliendolas, no pensar a nivel sueños. Quizás me gustaría más adelante poder tocar en Niceto, Roxy, soporte de bandas importantes. Pero la idea es prolongar el proyecto el máximo tiempo que se pueda y que los cuatro estemos conformes con eso. 

- ¿Cuál es la influencia de cada uno de los integrantes de Golová?

No están los otros tres pero yo te puedo hacer un pantallazo de lo que escucha más o menos cada uno. A Fran le gusta bastante el "grunge", fanático de Pearl Jam, Foo Fighters, también le fascina Led Zeppelin, pero tiene un aspecto bastante variado. Las bandas nacionales under le gustan mucho, como Pez, Massacre. Después, Jose es más estilo "funk". Su banda cabecera son los Red Hot y también Incubus. Feta tiene un bagaje musical muy amplio ya que arrancó escuchando Green Day, Metallica y ahora toca "jazz". Es muy abierto musicalmente. A mi particularmente me gustó de toda la vida Queen, es mi mayor influencia. De bandas actuales me gusta mucho The Killers, Foo Fighters, a nivel nacional imposible no nombrar a Soda Stereo, Los Redondos, son bandas que sí o sí se te pegan. Pero en este momento, por ejemplo, en el celular tengo temas hasta de Calle 13, Fito Paez, Noel Gallagher, Morrisey. Creo que la variedad musical es bastante importante en una banda y es bueno que cada uno aporte su idea. 

- Estas influencias que me nombraste, ¿Se ven reflejadas en las canciones de "PAF!"?

Creo que sí hay. No sabría decirte ni explicarte en que aspecto o cual particularmente pero sí que hay. Desde la batería te puedo decir que me gustan mucho las canciones que "me llegan al pecho", "me mueven". Me encanta la cuestión rítmica y eso lo podemos tomar de diferentes bandas como The Killers, por ejemplo, The Strokes, o incluso algunas de Queen. 

- ¿Cuál es el momento más difícil, más arduo a la hora de grabar un disco? 

Hay diferentes momentos. Nosotros antes de entrar a grabar estuvimos haciendo demos, tratando de mejorar cada canción, adaptarse a tocar con metrónomo. Para mediados de julio de 2011 ya estábamos listos para entrar a grabar y sobre todo muy ansiosos. Sobre ese último tiempo se volvió arduo, sobre todo por la ansiedad que teníamos. El final de la mezcla también fue tremendo ya que siempre encontrábamos algo más para corregir, alguna guitarra, tapar un poco la batería, los coros. Yo creo que los momentos difíciles se dieron al final de cada proceso. 

- ¿Cómo ves el Rock nacional actualmente? ¿Ha decaído con respecto a años anteriores? ¿O ves un auge en el ámbito underground? 

  Con respecto al under y particularmente en Arrecifes, estoy viendo cada vez más pìbes que tocan algún instrumento, que tienen una banda. En los festivales que se organizan en la ciudad está lleno de bandas de chicos muy chicos, lo cual me parece buenísimo. Y en el under en general es impresionante la cantidad de bandas que hay.

- Eso quizás imposibilita a una banda poder llegar...

Yo no lo veo de ese modo, porque uno tiene que trabajar, creer en su proyecto y darle para adelante. Después si laburas bien, si trabajas realmente a algún lado vas a llegar. Y digo, por ahí llegar es grabar tu disco, es poder materializar algo que laburaste tanto tiempo. Salir a tocar a mi me da mucha satisfacción. Por supuesto que a todos nos gustaría poder tener una masividad mayor pero es como secundario. 

- Si te dan a elegir un lugar para tocar, ¿Cuál elegirías y junto a qué banda?  

Y, yo quiero tocar en el antiguo Wembley (risas), por haber visto aquel recital de Queen en ese estadio en el año 86´. Ojo, el estadio renovado está genial, donde tocó en el 2008 Foo Fighters, recordado por haber tocado dos temas con Jimmy Page y John Paul Jones (Led Zeppelin). Aunque me gustaría que traigan a Freddie Mercury de vuelta y tocar con él (risas). 

lunes, 28 de mayo de 2012

Elefante blanco

Ricardo Darín cada vez sorprende más. Es el actor por excelencia que tiene Argentina y el representante máximo a nivel mundial de nuestro país. Se hizo notar en películas como "Nueve reinas", "Luna de avellaneda", "El mismo amor, la misma lluvia", "El hijo de la novia" y muchísimas más, todas con representaciones alucinantes. Junto con el director Juan José Campanella parecen construir la dupla más grande del cine argentino, que los llevó a coronarse en el año 2009 en el Oscar a Mejor película de habla no inglesa por "El secreto de sus ojos", cinta que maravilló a toda la audiencia por una historia de odio, venganza, muerte y sobre todo, amor. 
Pero aquí no hablaré sobre ella, tampoco sobre Darín, porque sino se acabarían los caracteres y los calificativos. Sí hablaré de "Elefante blanco", película recientemente estrenada que dirige Pablo Trapero, conocido por su corte realista, en donde destaca las injusticias de la sociedad en la que viven sus protagonistas. 


"Elefante blanco" comienza con la llegada de un cura francés llamado Nicolás (Jeremie Renier) a Villa Lugano, luego de que el cura Julián (Ricardo Darín) vaya a buscarlo de una masacre que éste vive dentro de una tribu. Julián vive en la villa en donde se encuentra el llamado "Elefante Blanco", edificio abandonado donde iba a ser el hospital más grande de Sudamérica y por distintas promesas no cumplidas por parte de funcionarios políticos se convirtió en la postal de Ciudad Oculta. 
A lo largo del film, los curas deberán combatir con la fe el problema de las drogas de los adolescentes y los cruces con la Policía Federal. También con ellos mismos, ya que vivir allí les imposibilita realizar sus actividades con normalidad y cuestionan su propia fe en cada situación peligrosa señalando como un Dios puede ser tan violento. 
La cruda realidad está en cada escena de la película, algo que su director Trapero sabe hacer muy bien. Las casi dos horas le queda corta a semejante historia, ya que hay muchas cosas para contar: los chicos que pueden encontrar una salida, el enfrentamiento entre pandillas locales, la intromisión de la Policía, las obras que desarrolla la Iglesia, la influencia de los "padres villeros". 
Muy potente en sus imágenes, reflexiva e intensa. Película altísimamente recomendada. 

La verdad de la “Tragedia de Once”

Primero, la línea ferroviaria que une la estación Once con el oeste de la provincia de Buenos Aires es la que está en peores condiciones. Es una de las más populosas de la Argentina, es la que transita por una de las zonas más conflictivas de la ciudad, ya que cruza gran parte de la Capital Federal por una zona densamente poblada, y, como si fuera poco, es una de las que tienen infraestructura más vieja. Los trenes, las vías y los sistemas de señalización son obsoletos y muchos de ellos ya tienen 80 años de antigüedad.
A ningún ferroviario, menos aún a los funcionarios del área de transporte, les puede sorprender que las tragedias en Once. La vieja infraestructura que aporta el Estado, la deficiente mantención y el atraso de un plan de obras anunciado y postergado por siempre son condimentos perfectos para que se cultive la tragedia. Hoy las obras en el Sarmiento están abandonadas, paradas, desaceleradas o simplemente adjudicadas y sin ninguna ejecución. La inflación y la imposibilidad de readecuar los costos de los montos licitados hicieron que varios adjudicatarios abandonaran o desaceleraran los proyectos.
La historia de lo que debería hacerse la planteó el Gobierno el 28 de diciembre de 2005. Entonces se firmó el decreto 1683, cuyo título era una declaración de principios: Programa de Obras, Trabajos Indispensables y Adquisición de Bienes Ferroviarios.
El proyecto más conocido es el soterramiento de la traza, es decir, entubar el recorrido desde Once hasta Moreno. La obra se licitó en 2006 y un año después se abrieron las ofertas. En 2008 se adjudicó el proyecto a la empresa Iecsa. En 2009 se pagaron los anticipos de gastos y se inició el proceso que, según el cronograma oficial, debería tener terminado a fines de 2011 el tramo desde Caballito hasta Ciudadela. La tunelera llegó, pero los trabajos en los túneles son incipientes.
El hecho ocurrió el miércoles 22 de febrero de 2012. Se produjo alrededor de las 8.30 y determinó la movilización de un masivo operativo del que participó personal del Same, bomberos y policías, además de la presencia de helicópteros para el traslado de heridos.
En la terminal de Once, uno de los centros neurálgicos de la Capital Federal ya que conecta con un amplio corredor de la zona oeste de la ciudad de Buenos Aires y del Conurbano, se hicieron presentes el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, el ministro de Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, y el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi.
"Fue un accidente muy grave", reconoció Schiavi antes de que se estableciera que había fallecidos, y precisó que el tren entró a la terminal "a 26 kilómetros por hora. Suponemos que hubo un desperfecto de frenos", fueron las primeras declaraciones del ex Secretario de Transporte.



Rol de los hospitales. Por la elevada cantidad de heridos, todos los hospitales de la ciudad quedaron afectados al operativo de atención de las víctimas. Después del mediodía, decenas de personas peregrinaban por distintos centros médicos para conocer la suerte de los familiares que habitualmente viajan en ese tren y no podían ser ubicados.
"Al parecer, el tren se quedó sin frenos cuando llegaba a la estación y terminó pegando contra el paragolpes", indicó el delegado gremial de la línea Sarmiento Edgardo Reynoso.
Esa posibilidad será investigada por el juez federal Claudio Bonadío, el fiscal Federico Delgado y personal de la comisaría séptima, con jurisdicción en la zona.
La formación salió de Moreno y transportaba 1200 personas. Ingresó a la estación desacelerando, pero 40 metros antes de llegar, a una velocidad de 20 Km. /h, dejó de frenar y chocó con los sistemas de paragolpes de contención del andén 2. Aún no se sabe si fallaron los frenos o si fue un error del conductor. Durante el accidente los primeros tres vagones se aplastaron, ocasionando los heridos más graves.
Aún no se ha determinado las causas de la colisión y la Justicia argentina las está investigando. Existen dos principales hipótesis a la pregunta ¿por qué no frenó a tiempo? la primera, por una falla en el sistema neumático de frenos, y la otra, debido a un error humano.
El ex Secretario de Transporte (ya que luego del accidente renuncia a su cargo) Juan Pablo Schiavi, afirmó que no se sabe que ocurrió en los últimos 40 metros antes de que el tren colisionara con el paragolpes del andén 2. El tren transitaba a 47 Km. /h a mil metros del accidente, a 26 Km. /h en la punta del andén y a 20km/h a 40 metros del paragolpes estas velocidades fueron medidas por el GPS.
Schiavi afirmó que hubo cambio de conductor en este tren que recorre 14 estaciones entre Moreno y Once, en la estación de Castelar, en dirección a Once, a las 7:49Hs. Tomaba su primer servicio del día. La formación antes de chocar, había realizado diez recorridos sin inconvenientes y era el quinto viaje de ida y vuelta. De acuerdo a fuentes gremiales, el mismo tren que chocó en Once había salido de los talleres el día anterior al accidente, luego de cumplir 10 días de trabajos de mantenimiento.
Asimismo, varios usuarios, gremialistas y políticos han denunciando en reiteradas ocasiones el pésimo estado de la línea Sarmiento en particular y del sistema ferroviario argentino en general.
Desde su privatización en 1995, está línea está bajo el control de la empresa Trenes de Buenos Aires y actualmente recibe subsidios del Estado nacional.
El presidente de la Auditoria General de la Nación, Leandro Despouy indicó: “no hay ninguna duda de que el Estado tiene una responsabilidad mayúscula en lo que concierne a la concesión de un servicio público, que sigue estando en manos del Estado: sólo se concede en la medida en que la empresa cumpla estrictamente con las condiciones que el propio Estado establece en el contrato de concesión” La auditoria realizada en el año 2008 informa: "a juzgar por el deficitario estado general de conservación que presenta el sistema, la gestión del Concesionario puede caracterizarse como ineficaz, dado que no se observa para el mantenimiento una respuesta técnica acorde al estado en que se encuentran los bienes concesionados".


Sin dudas, el caso se resolverá luego de todas las interrogatorios que el juez realizará a todos los acusados por la tragedia pero, ¿habrá algún cambio luego de lo ocurrido?
Decir que no va a volver a pasar es algo precipitado aunque parezca increíble, pero sin medidas de seguridad, sin un buen manejo de los subsidios que otorga el Estado a las empresas, sin un control que permita que la plata sea derivada al mantenimiento de vías y vagones, sin absolutamente nada, los trenes parecen estar cada vez más olvidados.
La tragedia de Once dejó un saldo de 51 muertos y más de 700 heridos. ¿Irresponsabilidad del conductor? Eso se verá, pero lo más importante en esta situación es mirar un poco para arriba y reclamar a las empresas y al mismo Estado los derechos que todos los usuarios del transporte público tienen. Viajar como animales es algo habitual en la hora de viajar en tren, así que se tiene que modificar todo de inmediato.
Ojalá que “NUNCA MÁS”.